Descripción
La obra se divide en varias partes y aborda una amplia gama de temas, desde la filosofía y teología hasta la historia y la política. En su núcleo, «La Ciudad de Dios» explora la relación entre la Ciudad de Dios y la Ciudad terrenal, es decir, la tensión entre la vida espiritual y la vida en la sociedad humana.
San Agustín defiende la idea de que la verdadera felicidad y salvación se encuentran en la Ciudad de Dios, que representa el reino divino y eterno, en contraste con la Ciudad terrenal, que está sujeta a las debilidades humanas y los males terrenales. A lo largo de la obra, Agustín explora cuestiones morales, la providencia divina, la historia y la redención, todo en el contexto de una profunda reflexión religiosa y filosófica.
«La Ciudad de Dios» ha dejado una huella indeleble en la filosofía y la teología cristiana y sigue siendo objeto de estudio y debate en la actualidad. Es una obra fundamental para quienes desean comprender las ideas y la influencia del pensador cristiano más influyente del primer milenio.